Pintores y artistas de todos los tiempos, han representado a las mujeres con cuellos delgados y flexibles que hacían resaltar la belleza del rostro, desde la maravillosa cabeza de la reina Nefertiti, de un desconocido escultor del antiguo Egipto, a las esbeltas figuras de Botticelli.

El cuello es sin duda una de las zonas que más delatan la edad. Afortunadamente la cirugía avanza cada vez más, obteniendo resultados asombrosos. No obstante antes de pasar por el quirófano, es preferible prevenir el envejecimiento mediante tratamientos, o bien mantener los resultados una vez que se ha realizado una intervención.
El cuello, sostenido por las vértebras cervicales, posee un entrelazamiento de músculos que permiten a la cabeza moverse en todas direcciones. En la zona Antero-lateral se encuentra el músculo cutáneo del cuello o platisma - lámina plana, que como su nombre lo indica, no tiene inserciones óseas – lo que lo hace propenso a perder elasticidad, y al poseer poco tejido graso se vuelve vulnerable a la flaccidez.

El cuello se resiente con la falta de cuidados estéticos, pues una escasez de glándulas sebáceas, lo cual provoca el deterioro de las fibras de colágeno y elastina causando sequedad, deshidratación y, por consiguiente arrugas.

El descolgamiento del mentón se debe a que los tejidos que sostienen la estructura del cuello pierden turgencia. Por este motivo debemos preocuparnos especialmente del cuello y ayudarlo a través de tratamientos cosméticos específicos para esta zona, que serán de gran ayuda para reforzar, hidratar y dar soporte muscular.

Consideraciones Generales para la zona del cuello

La piel del cuello posee unas características propias por su localización y el movimiento a que está sometido.

• La epidermis es más fina que en el rostro, y la dermis e hipodermis son también más débiles. Los melanocitos son también menos numerosos.

• Como dijimos anteriormente, el cuello tiene pocas glándulas sebáceas; por tanto, una menor protección contra las agresiones externas, pues posee una emulsión hidrolipídica insuficiente.

• Todas estas características explican su prematuro envejecimiento, con pérdida de elasticidad y relajación de los tejidos.

Alteraciones Estéticas del Cuello

• Flaccidez
• Arrugas (collar de Venus)
• Sequedad por disminución del agua y del aceite de la piel
• Piel anserina (una piel áspera, escamosa, la que ayudamos con exfoliaciones y maceraciones)

Es importante conocer a nivel profesional los tratamientos de estas zonas especialmente delicadas, y que poseen una piel fina, la cual manifiesta prematuramente el paso del tiempo, como es el caso del cuello. Generalmente esta zona se trata al mismo tiempo que el rostro, pero en ocasiones, requiere cuidados especiales, ya sea porque haya sufrido una cirugía estética o porque ha envejecido prematuramente.

PROTOCOLO DE TRATAMIENTO PARA PAPADA, CUELLO Y ESCOTE

Utilizar un tratamiento que aporte las siguientes propiedades sobre la piel de esta zona:

• Acción recuperadora anti-age
• Activación de la renovación celular
• Reafirmante
• Reforzante energético

1° HIGIENIZAR
Limpiar papada, cuello y escote con Leche de Limpieza Facial realizando movimientos rotatorios ascendentes. Complementar la higiene tonificando con una Loción Reafirmante

2° PREPARACIÓN DE LA PIEL

Macerar
Pincelar en papada, cuello y escote un Exfoliante Químico en base a Ácido Glicólico (no aplicar en párpados), acentuando en las zonas queratósicas.

Exfoliación física
Extender una Crema Exfoliante Facial por toda la zona y trabajar frotando en forma suave, especialmente en zonas queratósicas. En este paso se puede realizar un masaje anti-líneas. Retirar con abundante agua.

3° ETAPA ACTIVA

En esta etapa se proporcionan los principios activos requeridos para la Recuperación de la piel de la zona de la papada, cuello y escote.

a) Aplicar un concentrado en Serum o Ampolla en toda la zona y trabajar el producto con suaves manipulaciones de penetración y/o con aparatología como iontoforesis o electroporación.

b) Realizar un masaje reafirmante o aplicar un electrolifting en toda la zona tratada.

c) Aplicar una Máscara Reafirmante partiendo del contorno de la papada abarcando hasta el escote.

4° SELLADO

Finalizar el tratamiento aplicando una Crema Reafirmante específica para la zona del cuello.

Por Marisa Trentini
Esteticista y Subdirectora
Centro de Estudios Levinia Manfredini